terça-feira, 14 de julho de 2009

BURKA: UN FARO SIN LUZ



Hoy recebí de una querida amiga, esa nota. Me gustó mucho y comparto con todas las personas que visitan mi blog.

Es una nota de José Escuder.


Burka: un faro sin luz.


Hace cuatro décadas que paseo por La Rambla de Barcelona y pensaba que lo había visto todo. Como el Ayuntamiento lo permite, he visto, por ejemplo, a gente pasear desnuda. Como el Ayuntamiento no lo permite, pero lo tolera, también he visto todo tipo de delitos en mitad de la calle. O casi todos.Porque el sábado pasado vi por primera vez a una mujer paseando con burka. Una mujer que paseaba dócilmente all lado de su marido, dos niños y un hombre con aspecto de guardaespaldas. La mujer era muy alta, esbelta, y el color del burka le hacía parecer un faro negro. Un faro sin luz. Cuando la vi caminar, recordé aquella frase de un papa que decía: "Toda mujer debería avergonzarse por el hecho de haber nacido tal". Seguramente esta mujer no sabía oído hablar de este papa, llamado Clemente, pero satisfacía su deseo a la perfección. Estoy afirmando que era una mujer por mera suposición, porque su ropa no dejaba intuir el más mínimo rasgo de género. ¿De qué se avergonzaba esa mujer para esconderse así?. ¿De qué podría avergonzarse su marido para ocultarla de esa manera?. Todos sabemos qué delitos pueden llevarnos a prisión, pero, ¿qué delito hay que cometer para tener que llevar la prisión a cuestas?.Al llegar a la Fuente de Canaletas, los niños se pararon a beber agua. Bebieron ellos, el marido y el guardaespaldas. Pero a la mujer que iba allí dentro, nadie le preguntó si tenía sed. Eso, a pesar de que en el interior de ese traje la temperatura debería llegar casi a los cuarenta grados.Desoyendo las recomendaciones de mi acompañante, me acerqué al marido y, con toda la amabilidad de la que soy capaz en situaciones donde me apetece cualquier cosa menos ser amable, le pregunté qué delito había cometido su mujer para arrastrar por la calle, como un fastasma, ese tipo de condena. Como el marido dijo no hablar inglés, le pregunté al guardaespaldas. Este tampoco respondió, y cuando le prometí a mi acompañante que el tercero iba a ser el último intento, el hijo mayor, que tendría unos doce años, me respondió en un simpático inglés:- No crime. She is a woman.El padre le felicitó con una sonrisa, lo que demostró que sí conocía el idioma, y ambos se marcharon con sus pantalones cortos y sus sandalias, mirándome como si yo fuera un paleto que acaba de llegar a la gran ciudad.Según la OMS, cada año, en el mundo, dos millones de niñas son víctimas de mutilacón genital. Sólo en Bangladesh, los rostros de cientos de mujeres son rociados con ácido por parte de sus maridos o pretendientes. En Paquistán, cuando una mujer es violada, si quiere denunciar debe presentar cuatro testigos que demuestren su resistencia: si no lo consigue, aparte de la violación, además es arrestada por mantener relaciones sexuales ilícitas. Según Amnistía Internacional, en la India, casi la mitad de las mujeres reconoce sufrir empujones, patadas y puñetazos por parte de sus maridos, como castigo por cuestiones de limpieza doméstica, celos y demás. En un país como el nuestro, donde las mujeres son amenazadas, humilladas, golpeadas, apuñaladas y tiroteadas con el simple argumento de que sus parejas se creen con el derecho a hacerlo, en un país así, deberíamos tener mucho cuidado con tolerar ciertas conductas. Exhibir a una mujer con burka es justificar a los maltratadores, tanto si llevan toda la vida ejerciendo, como si tienen pensado comenzar a ensayar un día de éstos. Ser tolerante con otras culturas no debe significar ser cómplice de sus torturas. No importa lo que digan los ulemas o los papas. No importa que el Dios de La Biblia, que es el mismo que el de El Corán, afirme que el hombre es libre de vender a su hija como esclava sexual (Éxodo 21:7-11), o que diga que si un hombre en la noche de bodas descubre que su mujer no es virgen, deberá lapidarla en el umbral de la casa de su padre (Deuteronomio 22:13-21). Si las religiones son machistas, no es porque el hombre esté hecho a imagen y semejanza de Dios, sino porque es ese Dios el que está hecho a imagen y conveniencia del hombre. El deseo de santificar a las mujeres vírgenes y desconfiar del resto, obedece más a un trauma psicoanalítico que a una revelación espiritual. El hombre puede esconder sus inseguridades dentro de un burka, pero así jamás curará sus miedos. Se odia lo que más se teme, porque a veces se teme lo que más se desea. Y cuando el miedo se convierte en cultura, es fácil que la violencia se convierte en tradición. Como dicen los anti-taurinos, la tortura no es cultura: es sadismo. Si a un terrorista de ETA que acaba de asesinar a varias personas, durante el interrogatorio se le pusiera la capucha de un burka, esa dificultad para respirar ya sería considerada una tortura y todos nos escandalizaríamos.Bueno: todos, menos los familiares de sus víctimas.Lo que no se permite en el interior de una comisaría, no debería tolerarse en medio de la calle.La resolución 49.25 de la Asamblea Mundial de la Salud proclama que la violencia contra la mujer es un tema de Salud Pública y de Derechos Humanos, y exhorta a los Gobiernos a comprometerse en su prevención. Condenar a una mujer a vestirse como si fuera tu sombra, y obligarla a ver la vida a través de unos barrotes de tela a los que ni siquiera puede agarrarse, en una ciudad como la mía y en un país como el nuestro, esto debería ser considerado un delito. El hecho de ser mujer no debe estar por debajo del hecho de ser humano.Porque si es verdad que las mujeres deben avergonzarse por el hecho de ser mujeres, entonces todos los hombre deberemos avergonzarnos por el hecho de ser sus hijos.

3 comentários:

CIKTRICSTRANSGENIKS disse...

é um artigo muito bom. Eu gosto dele porque ele é feito por um homem. Pode me passar o link para publicar uma ligaçoe no nosso blog?
Muito obrigada!
Bicos e apertas (ke en galego es: besos y abrazos

Carlos Rafael disse...

Muy buen artículo. La mujer es la madre de la tierra, a ella le debemos ternura. Fátima recibe nuestro cariño y muito obrigado

Gerardo Omaña Márquez disse...

Interesante relato el que nos dejas con tus letras.
Besitos para tu alma.